Ramiro Chaves

Proyectos

Crótalos. 2016.

CRÓTALOS forma parte de un extenso proyecto del artista Ramiro Chaves relacionado a la fenomenología del uso de la X en la arquitectura, el lenguaje y la simbología mexicanas, desde las culturas prehispánicas hasta las contemporáneas. Su investigación comenzó hace cinco años y se ha manifestado a través de libros de artista, dibujo, instalación, fotografía, vídeo, proyectos web y poesía, siempre persiguiendo la recurrencia del símbolo y subrayando su persistencia. Para la Sala de Arte Público Siqueiros, Chaves se extiende al mural, continuando su insistente reflexión. El título que da nombre al Proyecto Fachada proviene directamente de la repetición del término—crótalos—en los textos del escritor, poeta, músico y antropólogo yucatecoJosé Díaz Bolio, quién estudió las relaciones entre los aspectos físicos de la serpiente cascabel—Crotalus simus—y sus representaciones en las culturas indígenas. En sus publicaciones, Díaz Bolio analizó las distintas peculiaridades físicas encontradas en las serpientes como son la imagen de la X repetida en sus pieles y los cascabeles de su cola, elementos que los mayas representaban a menudo con una forma de T en sus expresiones artísticas y en la arquitectura. En La geometría de los mayas y el arte crotálico, publicado en 1965, el autor presenta su tesis sobre las reglas de proporciones mayas donde propone el canamayte (imagen geométrica formada de una X y un diamante) como silueta base del diseño maya. Díaz Bolio llega a formular un paralelismo entre esta composición y el canon de las proporciones aureas que presenta Leonardo da Vinci en el Hombre de Vitruvio. Desde la introducción a su obra más conocida, La serpiente emplumada, eje de culturas (1955), Díaz Bolio nos urge a pensar el país desde sus orígenes fundacionales, mas allá del cruce europeo, y a reconocer la cosmogonía y la simbología de las culturas prehispánicas desde una mentalidad no occidental. Además de las propuestas estéticas de Díaz Bolio, Chaves incluye en este mural las aportaciones e ideas de otras dos figuras que han contribuido al pensamiento nacional: Manuel Amábilis y Adolfo Best Maugard. El primero, arquitecto yucateco quien desarrolló un estilo neo-maya en  sus obras de espacios públicos como plazas y bibliotecas en Mérida. El segundo, artista y cineasta, quien fungió como jefe del Departamento de Educación Artística en la Secretaría de Educación Pública entre los años 1921 y 1924, tiempo en el que implementó su método de dibujo en la educación primaria; inspirado en el estudio del arte precolombino, éste enuncia siete elementos básicos encontrados en el arte de todos los pueblos que, combinados de múltiples maneras, pueden llegar a representar cualquier forma de la naturaleza. La fachada de Chaves combina elementos visuales creados por estas tres figuras, quienes incursionaron en la práctica pública en algún momento de sus trayectorias intelectuales. Para esto, emplea materiales como el mosaico veneciano y la pintura en aerosol, ambos  medios que pueden verse como alternativas actuales de la expresión pública contemporánea. El mosaico se observa en la ciudad a través de edificios privados y públicos; fue utilizado por el mismo Siqueiros en su obra El pueblo a la universidad, la universidad al pueblo. Por una cultura nacional neohumanista de profundidad universal. (1952-1956), ubicado en la rectoría de la UNAM, así como por artistas como Carlos Mérida y Juan O’Gorman. Por otro lado, la pintura en aerosol se manifiesta en el espacio público de manera tanto oficial como extraoficial, y representa una herramienta instantánea de expresión o marca urbana. Así, Chaves genera en este proyecto, mediante los medios y las iconografías que emplea, un diálogo con la historia nacional de la obra pública a través de los tiempos.  

2016. Proyecto Fachada. Sala de Arte Público Siqueiros. Curaduría de Michele Fiedler. Ciudad de México.